Los primeros dos meses de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador no fueron fáciles, teniendo en cuenta los diferentes eventos que pusieron nerviosos a los inversionistas, tales como la cancelación del Nuevo Aeropuerto y las consultas públicas, sin embargo los datos del Banco de México revelan que hay un mayor apetito de los inversionistas extranjeros por bonos nacionales que en otros sexenios.
Desde que asumió la presidencia el 1 de diciembre de 2018 hasta el cierre de enero de este año, la tenencia de bonos M en manos de extranjeros pasó de 1 billón 788 mil millones de pesos, a 1 billón 836 mil millones, lo que significó una entrada de 48 mil 367 millones de pesos o un incremento de 2.68 por ciento. En este periodo la tasa del Banco de México fue de 8.25 por ciento.
Este flujo de entrada de capitales extranjeros es el más alto si se compara con los dos primeros meses de gobierno de las administraciones anteriores.
En los dos primeros meses de la administración de Enrique Peña Nieto, las compras de bonos M por parte de inversionistas extranjeros fueron de 5 mil 815 millones de pesos, pero en ese entonces la tasa del banco central estaba en 4.50 por ciento.
En la presidencia de Felipe Calderón las compras de estos instrumentos fueron por 20 mil 378 millones de pesos y había una tasa (TIIE) de 7.3 por ciento, mientras que con Vicente Fox Quesada ascendieron a 768 millones de pesos, con una TIIE de 18.80 por ciento.
RETOS PARA MÉXICO
Martín Castellano, jefe de análisis para Latinoamérica del Instituto de Finanzas Internacionales (IIF, por sus siglas en inglés), dijo en entrevista que los mercados en la región en general se han beneficiado de la mejora de las condiciones externas globales, sin embargo, para México ha sido un reto generar confianza.
“En México ha sido un desafío para el gobierno obtener el apoyo de los inversionistas. Cumplir las promesas de campaña, mientras se mantiene la disciplina fiscal y mantener el apoyo al mercado requiere un acto de equilibrio difícil y un aumento del pragmatismo”, aseguró.
Los bonos M son considerados un termómetro de la confianza de los inversionistas sobre el gobierno. Una menor compra o salida de este instrumento puede reflejar desconfianza o incertidumbre por parte de los inversionistas, caso contrario si hay una mayor entrada.
De acuerdo con el IIF, están detectando “fuertes” entradas de flujos de capitales extranjeros a mercados de economías emergentes, debido principalmente a que los inversionistas buscan mayores rendimientos fuera de EU, luego de que la Fed mandara un mensaje de que el alza de sus tasas podría tomar una pausa.
“La búsqueda del rendimiento está claramente en curso nuevamente, y ya no se limita a China, sino que se amplía al resto de economías emergentes, incluidos México, Corea del Sur, Indonesia y, más recientemente, Turquía”, señaló Castellano.
Joel Martínez, economista de SIF ICAP, destacó que la confianza de los portafolios globales y la política ‘dovish’ del banco central de EU han permitido la consolidación del tipo de cambio alrededor de 19 pesos. “Los flujos de capitales financieros hacia México han sido abundantes, y eso ha permitido que el peso mexicano sea una de las monedas más revaluadas”, agregó.
Fuente: Valdelamar, J. (25 de febrero de 2019). México. Información: Sexenio de AMLO arranca con apetito de extranjeros. El Financiero. (10,297) p. 15
